Claudio Monteverdi, es considerado como uno de los máximos exponentes de la música, sus aportes inigualables lo convirtieron en una pieza fundamental, a tal punto de ser conocido como el ícono musical más brillante del entorno religioso que vió nacer el mundo entre los años 1500 y 1600.

Esta afirmación se hace con base, en que fue uno de las principales figuras musicales que marcó el posicionamiento del género madrigalista dejando atrás a las composiciones de múltiples voces y trabajó en el surgimiento de la ópera.

Fuente | es.wikipedia.org – Autor desconocido – Representa al artista con 30 años de edad

La historia de vida de Claudio Monteverdi

Este insigne personaje, nace en el poblado de Cremona, el cual para su momento era una provincia perteneciente al Impero Español, el día 15 de marzo del año 1567. Creció en el seno de una familia de clase muy baja, pues su padre era un simple barbero.

Sin embargo, su baja condición socioeconómica no impidió de que accediera una buena formación académica en música, pues recibió clases del famoso Marco Ingegneri, pues con un talento de sobra, era de esperar que diera frutos desde muy temprano ya que con apenas 15 años de edad, en el transcurso del 1582, compuso su primera producción.

Ejerció labores importantes dentro de la iglesia, pues fue elegido como maestro de capilla, en un centro religioso local, luego de sus enseñanzas de composiciones de polifonía a los niños y para su hermano. Su popularidad fue aumentando cada día, a medida que iban saliendo a la luz pública sus libros acerca de madrigales, salidos al mercado sucesivamente los años 1587, 1590, 1692 y 1603.

Monteverdi en realidad fue un artista muy completo, pues a pesar de sus composiciones madrigales, también se interesó en otros estilos, como por ejemplo, los dramas musicales, gracias a su admiración y los consejos del gran Jacopo Peri. Para el año de 1559, contrae nupcias con una hija de un gambista, llamada Claudia de Cataneis, con la que tuvo tres hijos Francesco, Massimilino y Lenora.

 

Precursor musical y su vida artística

Monteverdi comienza su trabajo a nivel musical, cantando y tocando el violín, en la famosa corte de Mantua, dónde permaneció durante 12 años hasta que es ascendido en 1602 a director de dicha corte.

Su inicio en la ópera, fue como todo un legendario, cuando en 1607 cuando presenta al mundo su primera ópera, llamada “Orfeo favola in musica”, siendo un total y rotundo éxito, pues sin querer marcó el inicio de la nueva era del Barroco y generando el nacimiento de un nuevo estilo de música, que se conocería hasta la actualidad como “Drama Musical” .

Esta obra fue llevar a la Ópera a un nivel superior, pues mediante el uso de técnicas vocales, se buscó amplificar al máximo todos las emociones de los actores que fueron acompañados de una orquesta amplia y con una fuerte participación, ya que contenía en su partitura contenía 14 partes independientes dentro de la orquesta.

Al siguiente año, le ofreció a su ansiado público, la ópera Arianna y el muy reconocido Lamento de Ariadna, que lo consolidaron como un ícono y precursor de la ópera en el mundo.

Llega a la cima del éxito musical eclesiástico, cuando es nombrado director del coro para 1613 de la famosa Catedral de San Marcos, en la ciudad de Venecia, luego en esa misma ciudad es designado como maestro musical de la “Serenísima”. En su estancia, en esa importante ciudad, escribió una cantidad de óperas, madrigales y canciones de misas.

En 1637 se inaugura para la ópera un teatro, para el cual Monteverdi compuso una variedad de producciones, sin embargo, sólo se conservan dos llamadas “El retorno de Ulises a la Patria” y la “Coronación de Popea”. Posteriormente en 1640, escribe la obra “Selva morale e e spirituale”.

Monteverdi también era un amante de los madrigales, por ende se dedicó por 40 años a la escritura de ellos, publicando 8 libros en vida y 1 que salió a la luz después de su muerte, cuyos libros sentaron las bases para la transición musical hasta el género barroco.

 

Final del legado musical de Monteverdi

Claudio Monteverdi, abandona el mundo terrenal, el día 29 de noviembre del año 1643, en su querida Venecia, dejando un legado trascendental en la historia musical, sus obras continúan siendo escuchadas y estudiadas por los amantes de este mundo.