Llamado el filósofo, fue un gobernante romano de 161 a 180. Marco Aurelio Antonino Augusto controló con su hermano, Lucius Verus, hasta que Verus falleció en 169, y con su hijo, Commodus, de 177. Era el resto de los gobernantes conocidos habitualmente como los Cinco Buenos Emperadores.

Era un profesional del estoicismo. Sus propias obras filosóficas, que más tarde se llamaron Meditaciones, son una fuente crítica de la comprensión de vanguardia de la vieja lógica estoica. Han sido vistos como una de las mejores obras de racionalidad.

 

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En medio de su gobierno, el Imperio Romano derrotó un Imperio Parto renovado en el Este; El general de Marco Aurelio, Avidio Casio, despidió a Ctesifonte, la capital parta, en 164.

En Europa focal, Marco Aurelio luchó contra Marcomanni, Quadi y Sarmatians con avances en medio de las Guerras de Marcomannic, a pesar de que el riesgo de los grupos germánicos comenzó a hablar. Una realidad perturbadora para el Imperio. Se dice que el abuso de los cristianos se ha expandido en medio de su gobierno.

Su muerte en 180 es vista como una conclusión a la Pax Romana. La debilidad en expansión en Occidente que se persigue ha sido vista generalmente como el comienzo de la posible caída del Imperio Occidental Romano.

 

Comienzos y familiares

La familia de Marco Aurelio comenzó en Ucubi, una zona residencial al sureste de Córdoba, en la Baetica Ibérica.

La familia prosperó en la parte final del primer siglo. El extraordinario abuelo de Marcus Aurelius, Marcus Annius Verus I, fue congresista y (según la teoría de la Historia Augusta) ex funcionario.

En el año 73 y 74, su abuelo, Marco Annius Verus II, fue nombrado patricio. El hijo mayor de Verus, el padre de Marco Aurelio, Marco Annius Verus III, se casó con Domicia Lucilla.

Lucila era la niña del patricio P. Calvisius Tullus Ruso. Su madre, además de Domitia Lucilla, había adquirido una extraordinaria fortuna (retratada finalmente en una de las cartas de Plinio) de su abuelo materno y su abuelo paterno por adopción.

La Lucila, más joven, obtendría un poco de la riqueza de su madre, incluida una extensa fábrica de ladrillos en los bordes de Roma, una empresa beneficiosa en un momento en que la ciudad se encontraba en una explosión de desarrollo.

 

Promoción de Marco Aurelio y Verus, Soberano

Después de que Antonino Pío pateó el balde en 161, Marco Aurelio fue adecuadamente el único líder del Imperio. Las convenciones del cargo seguirán.

En poco tiempo, el Senado le aprobaría el seudónimo de Augusto y el título de emperador, y en poco tiempo sería elegido formalmente como Pontífice Máximo, ministro jefe de las religiones oficiales.

Marco Aurelio hizo alguna demostración de obstrucción: el biógrafo cree que estaba “obligado” a tomar el poder supremo.

Esto puede haber sido honesto a la bondad imperiosa imperii, “miedo al poder magnífico”. Marco Aurelio, con su inclinación por la vida racional, encontró que el cargo supremo no era atractivo. No obstante, su preparación como estoico había tomado la decisión inconfundible de que era su obligación.

 

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Herencia y notoriedad

Marco Aurelio obtuvo la notoriedad de un gobernante erudito durante su vida, y el título seguiría siendo suyo después de la muerte; tanto Dio como el biógrafo lo llaman “el pensador”. Cristianos, por ejemplo, Justino Mártir, Atenágoras y Melito también le dieron el título.

El último llamado se aventuró hasta el extremo de llamarlo “más altruista y reflexivo” que Antonino Pío y Adriano, y lo puso en contra de los maltratadores gobernantes Domiciano y Nerón para hacer que la complejidad fuera más audaz.

“Solo de los soberanos”, compuso el estudiante de historia Herodiano, “confirmó su aprendizaje, no por palabras o información sin importancia de principios filosóficos, sino por su carácter impecable y su estilo de vida suave”.

Iain King considera que la herencia de Marco Aurelio es desastrosa, a la luz del hecho de que la “lógica distante del jefe, que tiene que ver con la paciencia, la obligación y el respeto hacia otras personas, estaba tan degradadamente abandonada por la línea suprema que él bendijo a su paso” .

 

Su nombre

Marcus Aurelius fue concebido Marcus Annius Verus en Roma el 26 de abril de 121. Sin embargo, algunas fuentes contrastan, dándole este nombre a la muerte de su padre y la apropiación de su abuelo, o más tarde de pasar a la edad.

Pudo haber sido conocido como Marco Annius Catilius Severus durante el parto o tarde o temprano en su juventud. También puede haber sido nombrado Marco Catilius Severus Annius Verus.

A partir de su recibimiento de Pío como beneficiario de la posición real, se lo conoció como Marco Aurelio. Aurelius Verus Caesar y, después de su ascenso, fue Marco Aurelius Antoninus Augustus hasta su fallecimiento.