La democracia es el sistema político donde las diferentes decisiones que puede tomar un gobierno son sometidas a votaciones, donde la decisión más votada será la ganadora.  Sin embargo, la democracia se puede llevar a cabo de dos formas, de forma directa o de forma representativa.

 

En la democracia directa la población cumple con un papel fundamental ya que es la que se encarga de llevar a cabo la toma de decisiones, mientras que en la democracia participativa, los ciudadanos escogerán a diferentes personas que se encargaran de representarlos en los diferentes organismos políticos como los congresos o las asambleas, en la cual se tomaran las decisiones apoyadas por cada uno de los representantes de esas personas. La democracia participativa es el sistema de democracia más usado en el panorama actual.

 

Origen de la democracia.

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La democracia se ha implementado por primera vez en la Antigua Grecia, la cual se encontraba separada en ciudades-estado que se llamaban  polis. Dentro de estas ciudades-estados, las decisiones no eran elegidas por ningún tipo de figura autoritaria, sino que era elegida a través de una asamblea en la que podían participar los ciudadanos. Estos ciudadanos debían de ser varones, no poseer ningún estatus de esclavitud y necesitaban tener la mayoría de edad.

 

Gracias a las implementaciones de este sistema, los ciudadanos podían coordinarse para llevar a cabo la toma de decisiones siendo innecesario el uso de representantes que actuaran bajo la voz de una comunidad.  A menudo, las decisiones tomadas por los ciudadanos podían alterar o invalidas aquellas que se realizaron en el pasado, por ello se instaló un mecanismo llamado Graphe Paramonon, el cual invalidaba aquellas decisiones que podían interferir o anular las ya realizadas con anterioridad.

 

La cultura griega se expandió de forma muy rápida gracias a su eficaz sistema, el cual pudieron adoptar ciertas culturas que se encontraban en los territorios circundantes, siendo implementado luego de unos años por el famoso Imperio Romano, sin embargo este le aplico modificaciones propias como la capacidad de participación a aquellas personas que no hayan nacido en Roma. Este cambio adoptado por los romanos posee bases religiosas, ya que estos se guiaban bajo principios cristianos y estos establecían que todas las personas cristianas eran iguales ante la mirada de Dios.

 

A pesar de esto, existen usos de este sistema por civilizaciones anteriores a la Antigua Grecia. Uno de ellos fue el tratado de Arthaśāstra escrito en el año 300 a.C, el cual describía la importancia que tenían los ciudadanos en la toma de decisiones aun teniendo un rey a cargo. De la misma manera, existían civilizaciones ubicadas en el norte de la India que utilizaban este sistema político, como la civilización Kuvasati.

 

Gracias a las campañas realizadas por Alejandro Magno,  se tiene conocimiento de diferentes civilizaciones de esa época que implementaban el uso de un sistema basado en la en la democracia. Desafortunadamente, los pobladores de estas civilizaciones democráticas fueron arrasados por los partidarios de gobiernos basados en la monarquía, los cuales eliminaron cualquier rastro de democracia de estos pueblos, de manera que no hubo ninguna forma de que los mismos hayan servido como inspiración a otras civilizaciones.

 

La democracia en tiempos modernos.

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Podemos encontrar la implementación de sistemas basados en la democracia en civilizaciones más recientes como el Tuatha de origen irlandés o en aquellas ciudades independientes que pertenecen a los países de Italia o Suiza, el cual a su vez es el mismo tipo de sistema que utilizaron las tribus germánicas.

 

Sin embargo, los cambios más importantes surgieron en el siglo XVI, ya que fueron las modificaciones que dieron origen al sistema de democracia utilizado en la actualidad. Un ejemplo que podemos utilizar es la República de las Dos Naciones, la cual funcionaba de acuerdo a los ideales de platón, que establecía que las personas más sabias debían obtener los cargos de gobernantes.

 

Esta república, aunque tenía un monarca, se regía bajo una cámara de representantes y basaba su poder a través de las decisiones tomadas por la cámara y por las leyes ya establecidas con anterioridad en la misma, teniendo una semejanza muy cercana al diseño de las repúblicas modernas.

 

En el siglo XVII y XIX se producen cambios de gran importancia de acuerdo a las formas de gobierno establecidas. La incorporación de diferentes documentos importantes como la Carta Magna (la cual se escribió en el año 1215) y el Bill of Rights (la cual se escribió en el año 1689) le permitieron a Estados Unidos llevar a cabo la firma de la Declaration of Rights, desarrollada en el estado de Virginia en el año 1776, así como la creación de la constitución de los Estados Unidos en el año 1789.

 

La revolución francesa trajo grandes avances en los derechos de las personas ya que fue la primera en implementar los derechos para permitir el voto universal, además de llevar a cabo los procesos para abolir la esclavitud dentro de los territorios de Francia y a su vez establecer las bases para la Declaración de derechos del Hombre y Ciudadano, lo que establecería los derechos a los cuales puede acceder un ciudadano dentro de esa civilización, sirviendo como fuente de inspiración para otros países.

 

Bajo la búsqueda de atención por parte de los políticos son creados los partidos políticos, los cuales se ven regidos por personas que a través de la simpatía y acciones buscan el voto de la personas. Desde este momento la democracia deja de ser considerada como una forma de anarquía, ya que se tenía entendido que esta buscaba solo destronar gobernantes.

 

El final de la Primera Guerra Mundial marcó un capítulo importante en la democracia, ya que al terminar la misma, las naciones monárquicas sufrieron un cambio en su estructura, lo que permitió finalizar con todos los imperios y con todas las colonias que aún se establecían en los países pertenecientes al tercer mundo, en el que se encontraba los territorios de América Latina y diferentes poblaciones de África y Asia.

 

En la actualidad el fracaso que han tenido las dictaduras, las cuales adoptaron sistemas como el comunismo o el fascismo, le ha demostrado al mundo que el sistema de gobierno ejemplar para el desarrollo de una nación prospera es la democracia.