Cajamarca, es una ciudad estratégicamente ubicada en el circuito norte, cuenta con importantes atractivos turísticos de tipo ecoturístico, cultural – histórico, agroturístico, místico y religioso, además de una actividad artesanal y creativa, que motivan la visita de diferentes tipos de turistas, por la variedad de sus recursos y las diversas actividades que pueden realizar.
Considerada Patrimonio Histórico y Cultural de las Américas, se transformó durante la época incaica en un centro administrativo, militar y religioso de singular importancia. El 16 de noviembre de 1532, fue escenario de uno de los episodios más trascendentales de la historia americana, cuando un grupo de españoles al mando del conquistador Francisco Pizarro tomó preso al Inca Atahualpa. Este, según las crónicas, llenó el Cuarto del Rescate una vez de oro y dos veces de plata hasta donde alcanzara su mano. Actualmente, una marca en el muro de piedra señala hasta dónde se llenó el recinto.
La ciudad refleja la influencia española en la arquitectura de la Catedral, las iglesias de San Francisco, Belén y la Recoleta; y en sus casas de dos pisos y techo a dos aguas.
Cajamarca constituye una región clave para el desarrollo turístico, porque cuenta con reconocidas ventajas competitivas en segmentos de mercados que se proyectan como los de mayor crecimiento en el sector.
El Proyecto Cajamarca que tiene el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional (AECI) está respaldado por el Comité para el Desarrollo del Termalismo de Perú. Por nuestra experiencia en investigación y puesta en marcha de villa termales y rutas saludables, en Portugal y España, Cajamarca responde al concepto de villa termal sostenible que se impone en la termalismo del nuevo milenio.
El reto de Cajamarca hoy, es poner en marcha el diseño de un proyecto urbanístico integral que aporte soluciones de diseño bioclimático y armónico que responda a las demandas sociales.
Un esfuerzo en el que trabajan conjuntamente las diversas instituciones del Estado para articular los recursos termales que dispone y crear los atractivos suficientes para atraer inversiones a una ciudad llamada a ser, por su privilegiada situación en el Camino del Inca, la primera villa termal de Perú.
BAÑOS DEL INCA
Al este de la ciudad se ubica el Complejo “Baños del Inca”, balneario de aguas termo minero medicinales antiguamente conocidos con el nombre de Pultumarca y fue el lugar donde se encontraba el inca Atahualpa a la llegada de los españoles. Se trata de manantiales naturales cuyas aguas brotan a la superficie a más de 70 grados centígrados.
Baños del Inca se constituye en el Primer Balneario Turístico del Norte del Perú por contar con las aguas termo – minero – medicinales, que emergen a la superficie en los denominados “perolitos” a una temperatura que varía entre los 65 a 76ºC, constituyéndose de gran importancia para el desarrollo de la crenoterapia o tratamiento hidrotermal.
Según los análisis realizados son ricas en sodio, potasio, litio, calcio y estroncio, contiene así mismo hierro, magnesio y sílice; por eso se le denomina agua sódica – carbonatada – calcio – clorurada – sulfatada. Las aguas termales de estos baños, son altamente medicinales especialmente para enfermedades reumáticas y tratamiento de la piel. También para afecciones nerviosas.
Baños del Inca se sitúa a dos mil 650 m.s.n.m. Durante el esplendor incaico, fue una residencia señorial rodeada de árboles y manantiales, se trata así de un balneario de lujo de alta jerarquía. Es considerado la principal atracción del circuito turístico del departamento de Cajamarca.
Aquí se encuentra la famosa Poza del Inca, que mide cuatro metros de largo por cuatro de ancho y tiene una profundidad de un metro con setenta centímetros. En este lugar, según los historiadores, Atahualpa recuperaba sus fuerzas antes de emprender nuevas jornadas de conquista y, más tarde, para combatir a las huestes de Huáscar, su hermano. Los Baños del Inca luce bien conservado y con algunas renovaciones.
Actualmente el Balneario consta de alrededor de 4.5 Hás. en donde se han construido diversas infraestructuras para la atención de turistas nacionales y extranjeros, las mismas que actualmente son insuficientes para la atención de la demanda especialmente durante los fines de semana y los días feriados.
Cuenta con una piscina de 25 x 12×2.8 m.; pabellón de pozos antiguos en número de 36, un pabellón con 17 pozos modernos denominado imperial, dos pabellones con 56 pozos denominados para turistas, baños sauna, servicio de hospedaje en 8 bungalows con 24 camas y un albergue con 90 camas.
Con la finalidad de brindar un mejor servicio y aprovechar eficientemente las aguas en tratamientos medicinales, se propone la construcción de infraestructura adicional y la dotación de otros servicios que complementen a los que actualmente brinda, tal como la construcción de un pabellón para brindar: recubrimiento o baño con lodo, baños sauna, baños turcos, masajes, etc.; acondicionamiento de un área con juegos recreativos y piscinas, construcción de restaurantes y cafetines, acondicionamiento de la zona arqueológica, etc..
El Valle de Cajamarca ha sido considerado, desde tiempos remotos, como el lugar idóneo para el descanso y la recuperación. En la actualidad prepara su diseño como villa termal, uniendo sinergias con el turismo ecológico y cultural. Es la respuesta a la demanda del nuevo termalismo.
Una apuesta innovadora del Viceministerio de Turismo de Perú, bajo la responsabilidad de Ramiro Salas Bravo, por impulsar y recuperar para su país y mostrar al resto del mundo, la potencialidad turística partiendo de la identidad del pueblo inca.