Desde hace unos años hay una asignatura en segundo de económicas que se llama Economía Financiera. No en mis tiempos, entonces lo aprendíamos después, directamente trabajando en los bancos. Por ello muchos inversionistas aprendían directamente de consejos de otros, de sus propios jefes o gerentes de donde trabajaran y no tenían una escuela que les evitara resbalar.
Para ellos, y para todos, las siete preguntas que todo inversor debe hacerse antes de cruzar la puerta de una entidad financiera (más aún si es un banco), son las siguientes:
1. Estoy en edad de consumir o invertir?
Si se es joven, con niños pequeños y se acaba de comprar una vivienda, sin duda no es el momento de invertir, es el momento de reducir las deudas, o de consumir. Pero si estoy próximo a la jubilación y no tengo hijos en casa, es el momento de invertir. Si se consume, lo mejor es fijarse en los tipos de interés de las hipotecas, los préstamos personales, que pagar cada mes las tarjetas de crédito y de no dejar ninguna cuenta en descubierto. Así nos ahorraremos pagar unos intereses de descubierto elevados y malgastados.
2. ¿Cuánto dinero necesito para mi jubilación?
Esta pregunta se la deben hacer los que ya han criado a los hijos, amortizado la hipoteca, y les queda poco para jubilarse. Quizás con el que espera cobrar de la seguridad social ya tiene bastante, entonces sólo tiene que vigilar de no gastar más de lo que ingresa. En caso contrario, se deben calcular el dinero que hay cada año una vez jubilado, además de la pensión. Si se quiere vivir como hoy en día, hay el mismo que hoy gastan, pero en general la gente consume algo menos, menos viajes al trabajo, menos comidas. Aunque hay gente que al principio gasta mucho más, debe pensar que hará.
3. ¿Cuántos años me faltan para la jubilación?
Si son muchos años, y ya no se tiene deudas, perfecto, es cuestión de ahorrar. Y mirar cuando hay que ahorrar cada año para llegar al gasto deseada.
4. ¿Qué tipo de interés debo tener en cuenta para hacer los cálculos?
En otras palabras: donde invertiré el dinero para que rinden lo que necesito para cuando me jubile? Esta pregunta antes era fácil de responder, hoy con los tipos de interés de los bonos por tierra, no tiene una respuesta agradable. Entre un 0 y un 3%?
5. ¿A qué instrumentos financieros invierto el dinero para que me rinden lo que necesitaré grande?
Esta pregunta empieza a ser interesante, en tanto y en cuanto la respuesta depende de muchas variables. Si ha hecho los cálculos y puede llegar a tener el dinero necesario con un tipo entre el 0 y el 3%, entonces los depósitos bancarios son una buena alternativa. Sin embargo, si tiene mucho tiempo por delante, una parte siempre se ha de invertir en bolsa, vale la pena, los rendimientos han sido siempre superiores.
Pero si, en cambio, ni con un 3% llegaría nunca a conseguir lo que cree que necesita, bien porque se ha decidido a ahorrar más tardar, bien por otras circunstancias, entonces las alternativas son muchas. Porque entonces es cuando la gente está dispuesta a arriesgar mucho, a invertir una parte muy importante en bolsa, a buscar rentabilidades elevadas pero con mucha variabilidad (volatilidad es la palabra adecuada).
Si no llega a lo que cree conveniente para vivir, no importa que lo pierda todo, tampoco tendría suficiente. Y entonces es cuando los inversores caen en la tentación de buscar elevadas rentabilidades, de instrumentos financieros que no saben muy bien qué quieren decir pero con los que quizás, quizás, ganarán mucho dinero. Hemos tenido muchos casos, preferentes, nuevas emisiones de bolsa (ahora están de moda las empresas tecnológicas). Es cuando los inversores franquean la puerta de Banco de Madrid y deciden participar en una sicav, en un fondo de inversión que dará mucha rentabilidad.
6. Necesitaré dinero de repente?
O soy bastante tranquilo para saber que con cobrar cada año un poco (o mucho, pero constante) tendré suficiente. Entonces la bolsa toma más interés, para aquellos que pueden esperar, que no se ponen nerviosos, una parte a bolsa posibilita una rentabilidad mejor. Pero no en productos que garantizan rentabilidades, que no se entienden, que tienen incorporadas opciones sobre diferentes activos financieros (generalmente sobre acciones o bonos).
7. Finalmente: qué entidad bancaria me merece confianza?
O prefiero pedir la opinión de un asesor financiero (se llaman EAFI), o ir a una boutique? Aquí si que ya depende del gusto de cada uno, hay que les gustan las minifaldas, pero luego no se quejan si los miran las piernas! Hay que llevamos pantalones, más discreto y seguro. Eso si que depende de cada uno, pero una consulta rápida a Internet, para ver si están clasificados, cuál es su historia, siempre vale la pena. Vaya, minifaldas pero de buena calidad!