La apendicitis es causada por la inflamación del apéndice intestinal, aquel que se encuentra al inicio del intestino grueso y en la zona derecha e inferior del abdomen. Actualmente este no tiene una función útil conocida para el ser humano, puede ser una secuela de la evolución humana.  Así como, aquellos músculos utilizados para mover las orejas o el hueso del cóccix aunque, se conoce que en su interior hay muchos folículos del sistema inmunológico, como los que existen en la laringe.

Problemas de apendicitis

Cualquier persona puede ser propensa a sufrir una apendicitis, esta enfermedad no tiene límite de edad, sin embargo, se ha determinado que las personas entre los 10-30 años son los más afectados sin razón aparente.

Cuando la inflamación del apéndice resulta ser persistente, este puede llegar a necrosarse (muerte del tejido) y literalmente pudrirse dentro del cuerpo, lo que provoca una peritonitis (ruptura del órgano), lo que puede ser muy peligroso para una persona.

Es por esto que, para solucionar este problema en muchos casos es necesario la extirpación quirúrgica, esta se convierte en la operación más frecuente a nivel abdominal.

Causas de apendicitis

El apéndice se inflama como consecuencia de la obstrucción del mismo, esto puede ser causado por distintos factores:

Hiperplasia de folículos linfoides: así como sucede con las amígdalas, los folículos del apéndice se puede infectar por alguna bacteria e inflamarse, crecer y obstruirse. Las personas jóvenes son más propensas a ello, y es por esto que, este es el tipo de apendicitis más frecuente.

Apendicolito: este podría clasificarse como la segunda causa más frecuente de la apendicitis, sucede cuando a través del intestino grueso existe un traspaso de materia fecal al apéndice y esto puede ocasionar la obstrucción del mismo.

Cuerpo extraño: de una forma parecida a la causa anterior, el apéndice puede obstruirse por algún cuerpo extraño que hayamos ingerido y no se ha procesado bien en la digestión, siempre que tenga el tamaño adecuado puede ser la causa de la obstrucción.

Parásitos y otros microorganismos: ya sea porque ellos mismos obstruyen el apéndice o porque ayudan en la inflamación de los folículos linfoides. Uno de los microorganismos que más se relaciona con esta afección es la Yersinia(encargado de la peste bubónica, peste neumónica y la peste septicémica).

Tumores: esta patología es muy poco frecuente, sin embargo, si se producen en el colon o el mismo apéndice, son una causa muy peligrosa para la apendicitis.

Síntomas de apendicitis

Es necesario acudir a un médico en caso de algunos de estos síntomas, para evitar que la apendicitis pueda llegar a peritonitis. Estos síntomas se conocen como la patocronia de Murphy, sin embargo, solo suele presentarse de esta forma en el 50% de los afectados, por lo que es difícil un diagnostico seguro.

  • Dolor en la zona alta del abdomen (epigastrio) o en la zona central del abdomen (región periumbilical). Este se denomina como un dolor sordo tipo cólico.
  • Náuseas y vómitos
  • El dolor se emite en todo el costado derecho del abdomen y termina localizándose en la fosa iliaca derecha (zona inferior derecha del abdomen).

Lo ideal es que los síntomas aparezcan justo en el orden mencionado, de otra manera se podría confundir un diagnóstico. Debido a que, si primero aparecieran las náuseas y los vómitos se puede confundir con la gastroenteritis.

Otros de los síntomas que también pueden ser relevantes, son la falta de apetito y la febrícula (inferior a los 38ºC), estos se encuentran en cada uno de los diagnósticos de la apendicitis, si la temperatura pasa a un nivel más grave se puede considerar la perforación del apéndice ocasionando una urgencia mayor.

Existen otras enfermedades y afecciones que pueden presentar estos síntomas, por lo que si son persistentes, lo ideal es recurrir a un médico lo antes posible para descartar las posibilidades de cualquier otra enfermedad y hacer el diagnóstico de la apendicitis

  • Enfermedad de Crohn
  • Diverticulitis de Meckel
  • Ileocolitis
  • Colitis amebiana o tuberculosa
  • Linfoma
  • Cáncer de colon
  • Alteraciones ginecológicas

Es por esto que, hay que estar muy consciente del estado propio de salud para advertir los síntomas e ir al médico por la causa indicada, sobre todo, en el caso de las mujeres. Algunas alteraciones ginecológicas como un embarazo ectópico, un quiste ovárico e incluso el proceso de ovulación en el ciclo menstrual pueden causar dolor o fiebre, y se logran confundir con una apendicitis.

Etapas de apendicitis

Usualmente estas etapas tienen distintos grados de duración para llegar a la perforación del apéndice, lo usual es un lapso de 24-48 horas desde el inicio de los síntomas, por otra parte, hay casos tan graves en los que la perforación del apéndice se puede dar antes de las 24 horas.

Etapa I: considerada como apendicitis simple, debido a que el moco que el mismo intestino segrega no fluye bien y comienza a obstruir el apéndice y hace que las bacterias de la flora intestinal se multipliquen y comienza el proceso inflamatorio.

Etapa II: conocida como apendicitis flemonosa, debido a que el apéndice comienza a aumentar de tamaño notablemente y aumenta la presión interior. Lo que ocasiona que la sangre no fluya como debe.

Etapa III: pasa a la apendicitis gangrenosa, donde las paredes del apéndice se van debilitando por la falta del flujo sanguíneo y la presión, por lo que las partes empiezan a necrosarse y segregar pus.

Etapa IV:apendicitis perforada, donde las paredes ceden, todo el pus y heces acumuladas se extiende en el abdomen generando una peritonitis.