¿Cuáles materiales son malos conductores de electricidad?

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¿Cuáles materiales son malos conductores de electricidad? Ilustración de una profesora

¿Cuáles materiales son malos conductores de electricidad?

Los materiales aislantes son resistentes al paso de electricidad. La electricidad nos permite iluminar nuestras calles y ciudades. Permite el funcionamiento de aparatos domésticos y otorga muchos beneficios más. Sin embargo, es necesario tener en cuenta los materiales que son malos conductores de electricidad. En principio por precaución ante tensiones eléctricas y luego para saber cuáles podemos utilizar al querer mandar o recibir electricidad.

Los aislantes se caracterizan por su alta resistividad. Se refiere a una magnitud física que permite determinar si un material es buen o mal conductor de electricidad. Por sí mismos, todos los materiales, hasta cierto punto, conducen electricidad. Lo que sucede es que algunos materiales no lo hacen tan bien como otros, entonces decimos que tienen alta resistividad.

La razón por la que ciertos materiales son malos conductores de electricidad es por su polarización eléctrica que impide la liberación de cargas. La conductividad o resistividad son fenómenos que dependen de la estructura e interacción de los átomos que componen un material. Entonces, en el caso de los materiales conductores como metales, los átomos se desplazan de tal manera que permiten el flujo de corriente eléctrica.

Materiales aislantes o malos conductores de electricidad

Los aislantes eléctricos son materiales con baja conducción de energía eléctrica. Se utilizan para evitar descargas o para que las personas tengan contacto con la electricidad al usar aparatos. Entre los materiales que cuentan como aislantes o se consideran malos conductores de electricidad tenemos:

  • Teflón
  • Cerámica
  • Losa
  • Plástico
  • Cuarzo
  • Fibra de vidrio
  • Barnices
  • Mica
  • Fibra de carbono
  • Madera
  • Goma
  • Vidrio
  • Arcilla
  • Alúmina u óxido de aluminio (Al2O3)
  • Feldespato
  • Silicona
  • Hule
  • Minerales
  • Resinas
  • Porcelanas
  • Polímeros
  • Nylon
  • Porcelana

Hemos hecho mención de las aplicaciones que tienen los aislantes eléctricos. Sin embargo vamos a ser más precisos en este sentido. Entre las aplicaciones que tienen los materiales que son malos conductores de electricidad destaca su potencial para evitar cortocircuitos. De esta manera se garantiza la protección de las personas que manipulen algún equipo instalación eléctrica. Cuando se trata de torres de alta tensión o incluso postes de electricidad se utilizan como aislantes.

Estos materiales también son empleados como resistencias en los circuitos electrónicos. En el caso donde se hace uso de cables conductores, los aislantes elegidos o propicios son los de plástico. Se recubren y así se previene de choques eléctricos. Cuando se utilizan hilos de bobina de cobre, el material no conductor seleccionado es barniz aislante.

Tipos de conductores

Los materiales pueden, además, ser clasificados según su conductividad en varios tipos, entre los que tenemos:

  • Conductores eléctricos: son materiales que permiten el flujo de electricidad transmitiéndose sin problema a cada uno de los puntos de su superficie. Los materiales que mejor conducen son los metales. Sin embargo, otros materiales como el grafito, soluciones salinas y los que están en estado de plasma resultan buenos conductores.
  • Conductores dieléctricos: son aquellos que oponen resistencia al flujo de corriente eléctrica. Ésta no puede ser transmitida a cada punto de su superficie. En esta categoría de conductores entran los materiales que son malos conductores o aislantes.
  • Semiconductores: son aquellos materiales que bajo ciertas circunstancias pueden conducir electricidad sin ningún problema. En otras condiciones ofrecen resistencia al desplazamiento de electrones libres. Algunos de estos factores pueden ser el campo eléctrico o magnético, la radiación, la temperatura o la presión, entre otros.
  • Superconductores: son aquellos materiales que tienen la capacidad de conducir electricidad sin oponer ningún tipo de resistencia. No pierden energía bajo determinadas circunstancias.