La actividad respiratoria es necesaria para poder vivir. Este proceso se realiza de manera inconsciente y es importante aprender a realizarlo. Una adecuada frecuencia respiratoria es ideal para sentirnos bien y beneficiarnos de ella.
El poder mostrarte como respirar, de forma adecuada hará que te sirva de herramienta cada vez que lo consideres necesario.
Al ser la respiración un proceso automático, no se toman un tiempo para pensar si están respirando de forma correcta; o si a sus pulmones y resto de órganos vitales llega la cantidad de oxigenación necesaria. Aquí radica la importancia de respirar adecuadamente, es decir ¿te has preguntado alguna vez cuántas respiraciones por minuto tienes al día?
La respiración es un proceso que no solo nos mantiene vivos; sino que también nos ayuda a controlar sensaciones no tan agradables como; la angustia o el dolor, brindando la calma necesaria.
Al hablar de situaciones agradables pasa exactamente lo mismo, por lo cual respirar se encuentra ligado de forma directa al tipo de persona que somos a nivel emocional; y es algo que puede cambiar con el pasar de los años, dependiendo un poco de nuestro crecimiento.
La verdad es que dependiendo de cada situación o estado anímico, nuestra frecuencia respiratoria puede cambiar.
La primera muestra clara de que la respiración es dominada por nuestro estado anímico es que ante una noticia sorprendente. Por unos segundos la frecuencia respiratoria cambia de manera drástica, algo que puede afectarnos de no controlarlo.
Se han realizado distintos estudios que han determinado que la manera adecuada de respirar es con el diafragma. Esta es la forma de poder calmarnos con el paso del aire haciendo que se puedan oxigenar los diferentes órganos. Este tipo de respiración puede beneficiar de manera notoria a quienes la practican.
Ejercicios que te ayudan a mejorar la manera de respirar
Existen muchos ejercicios que te pueden ayudar a mejorar tu frecuencia respiratoria, aprendiendo algunos podrás sentirte mejor y ver todos los beneficios.
Lo que debes hacer es sentarte o permanecer de pie; con la columna recta debes inhalar por la nariz, haciendo que la parte inferior de los pulmones se llene de aire haciendo que el diagrama se ponga en acción.
Al bajar podrás apreciar cómo se va llenando de aire el abdomen; para luego subir las costillas, el esternón y que el aire llegue a la parte superior del pecho, da la sensación similar a realizar un estiramiento de cuello.
Al tener esa sensación, retén el aire por unos 3 segundos y luego exhala, pero despacio, metiendo poco a poco el abdomen, para botar todo el aire, siendo los últimos en sacar el pecho y el abdomen.
Se recomienda que practiques en forma diaria esta manera de respirar; hasta que lo conviertas en un hábito, algo que hagas de manera automática sin tener que detenerte a pensar cuál es la manera correcta de hacerlo.
Controla tu respiración
Lo que es muy cierto es que una respiración acelerada puede causar taquicardia, es por esto que es recomendable aprender a controlar la respiración. Para esto sería ideal poder sincronizar los latidos del corazón con la velocidad que tenemos al caminar.
El poder lograr esto es sin duda una actividad algo difícil al principio, pero luego de repetirlo en varias oportunidades, será algo que aprenderás regularmente. Se considera como saludable o como normal tener de 12 a 20 respiraciones por minuto.
Esto puede variar dependiendo si se trata de un adulto o un niño; pero de acuerdo a esas respiraciones, los latidos del corazón se pueden acelerar o no. El secreto definitivamente se encuentra en la práctica de estos ejercicios que en un principio pueden costar un poco pero que tu cuerpo de seguro agradecerá.