En los análisis que se hacen a distintas sustancias del cuerpo, el análisis de orina es uno de los más fundamentales e importante después del de sangre. Las sustancias que expulsamos de nuestro organismo nos ayudan a determinar si dentro del mismo hay cosas que funcionan mal. Por ejemplo es importante conocer el pH de la orina.
El análisis de orina puede realizarse para establecer problemas relacionados con enfermedades en el conducto urinario y otros males asociados. Sin embargo se ha podido determinar que gracias al pH encontrado en la orina es posible diagnosticar otras enfermedades que afectan de manera silenciosa al cuerpo humano como la diabetes. Cuando se identifica el pH de la orina, es posible saber si es ácida o alcalina.
Qué es el pH
El pH de la orina es un buen indicador de ciertos problemas que podemos desarrollar en nuestro organismo. Se trata de una medida creada y utilizada por años para hacer un cálculo certero y apropiado de la acidez o alcalinidad de una sustancia específica. Es común encontrar este tipo de pruebas en jabones o cremas en las cuales se dice que el pH es neutro, evitando algún tipo de daño por la acidez a la piel.
Las siglas pH significan Potencial de Hidrógeno y este indica la aglomeración de los iones de Hidrógeno que pueden estar presentes en cualquier sustancia. Incluyendo la orina.
Para hacer la prueba de pH en las sustancias es necesario saber la escala de valores. También requiere un procedimiento previo que indica la cifra exacta de los valores de pH. Las mediciones de este valor pueden arrojar dos resultados: acidez y alcalinidad.
La escala que mide estos dos valores es una sola, la cual comprende una numeración de 0 a 14, siendo el número 7 considerado neutro. Si un pH es superior a 7 es alcalino pero si es inferior a este número es ácido. En consecuencia un pH 5 es 20 veces más ácido que uno neutro. Del mismo modo ocurre en el sentido contrario de la tabla. Mientras más se aumenta, es mucho más alcalina la sustancia en un valor diez veces superior con respecto al número anterior.
El pH de la orina
Esta prueba se realiza para determinar los valores de pH generales del cuerpo. En este sentido la orina es uno de las mejores sustancias producidas por el cuerpo para determinar diversos problemas.
El pH de la orina puede darnos importantes cifras y un panorama más extenso sobre la acidez o alcalinidad que puede tener un determinado órgano. Por ejemplo en el hígado y los riñones. En consecuencia, si los valores arrojados por el análisis de pH están por debajo de los niveles neutros. Es decir ácido, pueden darnos ciertas luces sobre algunas enfermedades que deben ser tratadas con tiempo.
Entre estas enfermedades pueden mencionarse: Diabetes, inanición, deshidratación, caso severo o moderado de acidosis. Un pH ácido también pude indicar problemas relacionados con el aparato respiratorio o ser la causa de las defecaciones abundantes y líquidas como la diarrea.
Por otro lado, los valores que están por encima, es decir alcalinos, pueden estar asociados a otras enfermedades de igual atención inmediata. Tal es el caso de la tuberculosis renal, obstrucción del píloro, obstrucción de las vías urinarias, infección urinaria o vómitos.
Es necesario también mencionar que el pH de la orina puede cambiar o variar de acuerdo a la dieta alimenticia que se siga. Si la base de la dieta son las proteínas, el pH podría mantenerse ácido. En cambio si se basa en vegetales el pH arrojará un resultado alcalino. Los valores normales de pH de la orina oscilan entre 4,8 y 7,5.