No todos los niños se sienten motivados a ir a clases de manera diaria. Es importante como padres preocuparse por el bienestar de los hijos. Es necesario encontrar las maneras adecuadas para que los pequeños de la casa deseen asistir al colegio. En este artículo descubrirás cómo motivarlos y conocerás cuáles son las situaciones más comunes que los llevan a no asistir.
¿Por qué no quiere ir a clases?
Lo primero que debes hacer es descubrir por qué el niño no tiene ánimos de asistir al colegio. Puedes averiguarlas por ti mismo o dejar que el pequeño te las diga cuando se lo preguntes. Es muy importante que converses a menudo con él, solo así se sentirá seguro y confiado de revelarte qué sucede.
La comunicación entre padres e hijos, más si son pequeños, es importante. Muchas veces las razones pueden ser producto de la malcriadez. Pero siempre hay que estar atentos. Los niños son muy sensibles. Un mal gesto del maestro, un exceso de algún compañero o del mismo maestro puede desmotivarle a asistir al colegio. Es importante hacerle seguimiento a estos aspectos.
Por lo general los niños se divierten mucho en la escuela. Al mostrar una actitud negativa o poco acorde a la normal, es hora de prender las alarmas. Lo primero es conversar muy sutilmente y con inteligencia para saber qué pasa. Es necesario entender el por qué no quieren ir a clases.
Otras razones por las que los niños no quieren ir al colegio es por sueño, dificultad en el aprendizaje o por compañeros molestos. Descubre qué hacer en cada uno de los casos anteriores si tu hijo te revela que está sufriendo alguno de ellos.
Motivar en positivo
Cuando es exceso de sueño, la responsabilidad puede ser en parte tuya. Es importante que habitúes a tus hijos a irse a la cama temprano. Durante el día deben realizar sus actividades favoritas para que gasten energías. Así al llegar la noche, puedan ir a dormir tranquilos. De pronto es necesario cambiar por completo la rutina que has llevado hasta ahora. En casos extremos, visita a tu pediatra de confianza para comentarle lo que está sucediendo.
La dificultad en el aprendizaje puede ser otra de las razones por las que los niños se sientan desmotivados a ir a clase. Para solucionar este problema será necesario que discutas con ellos sobre todo lo que aprendieron en el día. Revisar periódicamente sus cuadernos. Es importante determinar qué tan bien o mal están realizando las actividades escolares y las tareas. Si notas dificultad en aprender lo que su maestro o maestra le está enseñando no dejes pasar demasiado tiempo. Conversa con el docente en cuestión y, si es posible, dedícale al niño ciertas horas de tu día. Esto permite reforzar los conocimientos aprendidos en clase. Si lo anterior no funciona es momento de que busques ayuda de un profesional. También puedes apuntar a tu niño en clases con profesores especializados en el área de mayor dificultad.
Por último, la presencia de compañeros molestos en el aula puede provocar que tu hijo evite asistir al colegio. Es importante que converses con ellos y permitas que te informen quiénes son sus amigos y quiénes no. Invita a los amigos a casa para que los observes bien. La manera cómo se comportan y hablan. Con ellos podrás saber más de los abusadores.
Solo así podrás determinar cuál es el problema que está sucediendo en el interior del aula. Deberás acudir inmediatamente al colegio para conversar con el maestro o la maestra del pequeño. Solucionar los problemas entre compañeros permitirá que tu hijo se mantenga concentrado en el aula. Adicionalmente se sentirá con más motivación para asistir a clases y compartir con sus amigos.