Pascual Orozco (1882-1915) nació en San Isidro, Chihuahua y fue uno de los líderes revolucionarios más destacados en la revolución mexicana, siendo un gran general. En el año 1910 se levantó en armas para apoyar el Plan de San Luis que era liderado por Francisco I. Madero.
Luego de que las fuerzas revolucionarias ganaran, Orozco fue nombrado como jefe de las tropas irregulares de Chihuahua. Sin embargo, luego de los sucesos de la Decena Trágica, Orozco se reveló en contra del gobierno de Madero y se juntó con el gobierno golpista de Victoriano Huerta, quien a su vez le dio a Orozco el cargo de General de la Brigada.
De esta forma Orozco acompaño a Huerta a Estados Unidos cuando fue exiliado. En el año 1915 murió en Texas, Estados Unidos, al ser asesinado.
La infancia y juventud de Pascual Orozco
Pascual Orozco nació un 28 de enero de 1882 en la Hacienda Santa Inés, muy cerca de San Isidro (que hoy en día se llama San Isidro Pascual Orozco en su memoria), en el municipio de Guerrero dentro del estado de Chihuahua, México.
Su padre llevaba el mismo nombre (Pascual Orozco) y era un comerciante de clase media que trabajaba en San Isidro, quien también trabajo como diputado suplente en la legislatura del estado y quien también fue un revolucionario. Su madre era María Amada Orozco y Vásquez. Ambos padres eran inmigrantes vascos de segunda generación.
Fuente | Subido por Ruiz en la Wikipedia versión español. [Dominio Público] – Pascual Orozco
Meses antes de que cumpliera los 20 años, Pascual Orozco se casó con Refugio Frías. Tiempo después, en 1902, comenzó a trabajar como arriero transportando materiales preciosos para las mineras del estado. Ahorro dinero durante un tiempo y usándolo abrió una tienda en el pueblo Estación Sánchez.
En el año 1910, Orozco ya tenía una buena cantidad de dinero guardada, la cual usaría para financiar su incursión revolucionaria.
Uno de los parientes de Orozco más destacado fue su sobrino Maximiliano Márquez Orozco, quien participo en luchas revolucionarias y llegó a alcanzar el rango de coronel gracias a su experiencia en batalla.
Participación de Pascual Orozco en la revolución maderista
Orozco comenzó a sentirse muy atraído por el Partido Liberal Mexicano y por las ideas de los hermanos Flores Magón. En el año 1906 llamó la atención de las autoridades por encargarse de la distribución de críticas literarias en contra del régimen porfirista.
En el año 1909 empezó a importar armas de Estados Unidos para apoyar la causa de la Revolución Mexicana. Orozco fue reculado por Abraham González Casavantes, partidario antireeleccionista en Chihuahua. Un dato curioso es que también fue él quien recluto a Francisco Villa para que participará en la revolución.
En 1910, Orozco consiguió ser nombrado como “jefe revolucionario” del Club Antireeleccionsita “Benito Juárez” en su distrito. Luego de una semana consiguió su primera victoria contra el general Juan N. Navarro. Tiempo después consiguió emboscar a las tropas federales en el Cañón del Mal Paso un 2 de enero de 1911. Tomaron los uniformes de los soldados y se los enviaron al presidente Porfirio días con una nota que decía: “Ahí tienes las hojas, mándame más tamales”.
Aunque no tenía experiencia, desde ese momento Orozco mostró que tenía un talento nato para la guerra. También destacó por tener una actitud belicosa, la cual le ayudo a ascender rápidamente.
Pascual Orozco en el gobierno de Madero
Luego de tomar Ciudad Juarez, Madero le dio a Venustiano Carranza el Ministerio de Guerra, cargo que Orozco quería, por lo que se sintió muy decepcionado al ser relegado a la comandancia de la primera zona de la policía rural de Chihuahua.
En 1921 Madero le ordeno a Orozco que combatiera contra las tropas de Emiliano Zapata en el sur del país, pero las ordenes fueron revocadas por el secretario de gobernación, Abraham González. El 3 de marzo del mismo año, luego de tomar el control sobre la capital de Chihuahua, Orozco se declaró en contra del gobierno Maderista. Él contaba con una gran fuerza y apoyo gracias a su fama de líder revolucionario.
El general Victoriano Huerta estableció su base en Torreón y después las fuerzas federales, junto a la División del Norte y al apoyo de los jefes maderistas locales, vencieron a los orozquistas y retomaron Ciudad Juárez, por lo que Orozco tuvo que escapar a Estados Unidos.
Luego del evento de la Decena Trágica, las tropas orozquistas fueron incorporadas a la milicia irregular y, bajo las ordenes de Huerta, Orozco envío a un grupo liderados por su padre para convencer a los zapatistas de que se unieran al bando federal. Este plan fracaso y el general Pascual Orozco (padre) murió al ser fusilado bajo las ordenes de Zapata, quien indico que los huertistas eran traidores de la revolución.
Huerta envío a Orozco a combatir contra Francisco Villa al norte, siendo derrotado en la batalla de Ojinaga. Así, Orozco siguió luchando hasta que Huerta renuncio y fue reemplazado por Francisco S. Carbajal, contra quien Orozco se rebeló, pero su plan fracaso y tuvo que volver a escapar a Estados Unidos.
Muerte de Pascual Orozco
Luego de escapar de México Orozco se estableció en El Paso, Texas, en donde, junto a otros revolucionarios en exilio, comenzaron a planear una rebelión armada masiva. De hecho, Huerta formó parte de la conspiración y trajo el apoyo de alto mando alemán, que quería abrir un tercer frente en el hemisferio occidental para entrar en guerra con Estados Unidos.
Pero esto llamó rápidamente la atención de las autoridades y fueron condenados a arresto domiciliario por violar política de neutralidad de Estados Unidos.
Escapó de su arresto domiciliario y fue abatido en Cañón del Rio Verde en Texas por un grupo de federales.
Orozco fue sepultado en El Paso y a su funeral asistieron cerca de 3mil compatriotas. El 1 de diciembre de 1925 su cuerpo fue llevado a Chihuahua, México.